En al menos 12 de las 32 entidades, actualmente, hay más elementos de la Guardia Nacional desplegados que efectivos registrados en las policías locales, entre ellas, Sinaloa, Sonora, Michoacán, Jalisco, Baja California y Guanajuato. El presidente de la República ha asegurado que son 19 las entidades que tienen más elementos federales que locales.
El presidente también ha propuesto que los militares se mantengan en tareas de seguridad pública algunos años más para permitirle a la Guardia Nacional consolidarse como una institución de seguridad pública. El debate aún se mantienen en el Senado de la República.
Al respecto, Rubén Ortega Montes, miembro del Observatorio de Seguridad y Justicia de la Universidad de Guadalajara, explica que los estados hoy enfrentan un déficit de policías y también de preparación en sus uniformados.
“Las policías estatales y municipales están disminuidas, operan con menos recursos, se les quitaron apoyos a seguridad, se desmanteló la seguridad pública civil, por lo que tenemos policías disminuidas, salvo casos especiales como la de la Ciudad de México, es otra realidad, pero si hablamos de pueblos donde no rebasamos los 10,000 habitantes tenemos corporaciones con máximo 10 policías”, explica.
Los expertos advierten que si bien no hay fuerza policial que por sí sola pueda combatir al crimen organizado, hoy se está violando el precepto que establece el artículo 129 constitucional: “en tiempo de paz, ninguna autoridad militar puede ejercer más funciones que las que tengan exacta conexión con la disciplina militar”.
“La milicia ganó terreno, ya tienen puertos, aduanas, aeropuertos, carreteras, ellos ya son dueños de la movilidad, ellos deciden qué entra, qué sale en México, desde un objeto licito hasta una persona sin la documentación necesaria”, agrega Ortega Montes.